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EXPOSICIONES PASADAS 2011 2023 · 2021/22 · 2019/20 · 2017/18 · 2015/16 · 2013/14 · 2012 · 2011 · 2010 · 2009 · 2008 · 2007 · 2006 · 2005 · 2004
* Las obras expuestas en la Zona Monumental y en el Pabellón Real permanecen hasta el 8 de abril. Las obras de los exteriores de forma indefinida. El título de esta exposición está tomado de las primeras páginas del libro de Robert Musil, El hombre sin atributos. La muestra parte del concepto de "no lugar" acuñado por el antropólogo francés Marc Augé, pero también se toma como referencia la teoría de la deriva asociada al situacionismo. Con todo ello se aglutinará una importante parte de la colección permanente del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo que tiene a la ciudad y al tránsito de lo rural a lo urbano como protagonistas. Las periferias urbanas hablan, como muy pocos lugares pueden hacerlo, sobre lo que acabamos de ser, sobre lo que por el momento continuamos siendo y, también, sobre lo que inmediatamente seremos. Los fenómenos especulativos y el crecimiento insostenible en ellas se representan sin maquillaje, aflorando las contradicciones del capitalismo tardío.
Julie Rivera, que desde Siding Spring (2004) trabaja con principios y presupuestos vinculados al mundo de la arquitectura y el urbanismo, realizará un proyecto específico para el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. El trabajo de esta artista nacida en Jerez de la Frontera (Cádiz, 1975) gira en torno a la relación entre el individuo y su contexto arquitectónico y urbanístico. Rivera utiliza el espacio público como un laboratorio donde, empleando elementos etéreos que se alejan del peso especifico de lo construido, realiza acciones o intervenciones efímeras. En cada uno de sus proyectos trata de integrar dos tipos de obras, unas más interactivas, en las que propone una intervención sobre el espacio que va creando una relación individuo-pieza; y otras más reflexivas que dan lugar a un conjunto de formalizaciones teóricas. La propuesta final es un registro lineal evolutivo del proceso de trabajo que lleva a cabo.
Artistas multidisciplinares, Libia Castro y Ólafur Ólafsson (España/Islandia) trabajan juntos desde 1997. Con sede en Rótterdam y Berlín, sus trabajos emplean materiales y técnicas muy diversas como el vídeo, la fotografía, la instalación, la escultura o el uso de textos. Exploran los espacios de lo permitido social y legalmente, y desafían normas y convenciones yendo un paso más allá de éstas. En esta exposición, Castro y Ólafsson presentan proyectos como Constitution of the Republic of Iceland, donde analizan el proceso de reforma constitucional que ha experimentado recientemente Islandia, o la provocadora "campaña" Your Country Doesn't Exist que realizaron por primera vez en 2003, a raíz de la invasión de Irak, y que desde entonces han ido promoviendo en diferentes lugares y contextos.
Interesada en analizar cómo se construye y funciona la ciudad contemporánea, en muchos de sus trabajos Lara Almarcegui (Zaragoza, 1972) documenta descampados, edificios en ruinas y otros espacios urbanos abandonados o en vías de remodelación, dándoles visibilidad pública e incluso, en ciertos casos, consiguiendo que estos sean protegidos de posibles usos especulativos y/o recuperados para el disfrute ciudadano. Almarcegui también ha realizado trabajos de medición y análisis de los materiales, volúmenes y pesos de las edificaciones de ciudades como Burgos, Dijon o São Paulo, o ha llevado a cabo performances sin público en las que explora las dinámicas relacionales que se generan en los procesos de montaje y desmontaje de determinados espacios efímeros. Esta artista siempre intenta aplicar sus ideas sobre la "no-arquitectura" y el urbanismo en los lugares en los que desarrolla sus propuestas expositivas. Por ello, para la muestra que realiza en el CAAC ha llevado a cabo un proyecto en torno al edificio del futuro acuario de Sevilla, cuyas obras se encuentran actualmente paralizadas. La obra de Andreas Fogarasi (Viena, Austria, 1977) se enmarca dentro de la crítica institucional. Trata de repensar los roles sociales y económicos que desempeña la cultura para facilitar la comprensión de sus propios mecanismos de producción, los intereses políticos que esconde y la forma en la que incide en las audiencias. Fogarasi presta especial atención a las ciudades contemporáneas, a la arquitectura y el urbanismo que las sustenta, así como las connotaciones sociales y económicas que esconden. Tanto es así que un tema recurrente en toda su producción es la comercialización de la ciudad a través de la creación de una imagen emblemática que va en detrimento de la pluralidad y heterogeneidad de su identidad. Construir / Desmontar es su primera exposición individual en España y reúne trabajos como Süden (Sur, 2005), donde se investiga la morfología de las poblaciones surgidas alrededor de importantes fábricas de automóviles; Public Brands (Marcas Públicas, desde 2003) en el que muestra cómo la creación de clichés puede llegar a uniformizar y, por tanto, a anular la heterogeneidad de una comunidad social; o Cities (Ciudades, desde 2006), series de dibujos que presentan diversos eslóganes de marketing ciudadano escritos a mano.
El conjunto de trabajos fotográficos sobre la ciudad de Sevilla mostrados en esta exposición abarcan un período de tiempo de 20 años, desde que a principios de la década de los noventa del pasado siglo Alejandro Sosa (Coria del Río, Sevilla, 1951) se planteara fotografiar, con una metodología específica, una serie de lugares de la ciudad. El momento en que comienza Sosa esta tarea coincide con una época en la que se están produciendo grandes transformaciones urbanas en Sevilla, en gran medida propiciadas por la organización de la Exposición Universal de 1992 en los terrenos de La Cartuja. La exposición deja ver en parte estas transformaciones a través de imágenes panorámicas de impecable factura cuya base conceptual está basada en la fragmentación. Sevilla, en tanto que sujeto urbano, es representada por fragmentos fotográficos. El método es siempre el mismo: una sucesión de tomas consecutivas de un determinado lugar hasta completar un círculo de 360 grados que se desarrolla en un solo plano. Todos los espacios son fotografiados a la misma hora, cuando el sol alcanza la máxima altura. Sin establecer jerarquías de valor en la ciudad y evitando la presencia humana, Alejandro Sosa, con ayuda de sus cámaras y sus grandes formatos apaisados, va construyendo año tras año sus propios paisajes urbanos no exentos de información documental.
Si hasta ahora la influencia del rock en el arte contemporáneo había sido objeto de estudio en algunas exposiciones, la aportación de esta muestra estaría en el camino de redimensionar la importancia capital de los movimientos musicales populares -y especialmente de la canción- en los cambios operados en la segunda mitad del siglo XX, ya sean estos de índole cultural (aparición de nuevas formas vivir la sexualidad, de vestir o de relacionarse con los demás) o de carácter político y económico. Por tanto, lo que La chanson, como exposición colectiva, intenta indagar es en cómo combinar lo personal y lo político a través de un formato musical -la canción ligera- reutilizado como medio por numerosos artistas contemporáneos que ven en él una manera de enfrentarse a la cultura popular mediante una forma cultural muy implicada en la vida cotidiana de los ciudadanos. La muestra, que reúne instalaciones visuales y sonoras de una quincena de artistas, toma su título del movimiento musical francés de los años 50 y 60 del pasado siglo que protagonizaron, entre otros, Edith Piaf, Jacques Brel, Boris Vian, Serge Gainsbourg, Juliette Gréco, Georges Brassens o Léo Ferré. Autores que en sus canciones y actuaciones mezclaban de manera natural elementos antagónicos: la ironía con el dramatismo, lo sencillo y directo con lo teatral y metafórico, los temas amorosos y sentimentales con la crítica política y social...
La exploración del sentimiento de colectividad
y de los estilos de vida que surgen de los encuentros musicales caracteriza
la obra de Matt Stokes (Reino Unido, 1973). En Nuestro tiempo,
su primera exposición individual en España, podemos ver una selección
de sus trabajos más representativos. Real Arcadia (2003) documenta
las raves que se celebraron a finales de los 80 en lugares rurales
alejados de Lake District, una región de Gran Bretaña. Long After
Tonight (Mucho después de esta noche, 2005) se centra en
la música y en el baile soul que surgen durante los años 70 en
el norte de Inglaterra. these are the days (estos son los
días, 2008-2009) investiga la eficacia y la actualidad del punk
rock en Austin, Texas. Ambientada a comienzos del siglo XIX, The
Gainsborough Packet (A bordo del Gainsborough, 2008-2009)
es una película en la que los diálogos -cantados y representados- siguen
el estilo del folk-pop. Por último, Cantata Profana (2010), la
vídeo-instalación que cierra la exposición, está protagonizada por seis
cantantes de extreme metal actuando a la vez dispuestos en seis
pantallas que forman un semicírculo como si se tratara de un coro tradicional.
Alonso Gil (1966) concibe la práctica artística
como una herramienta valiosa para incitar a la reflexión y construir
miradas críticas sobre nuestro entorno. Realiza su trabajo en un espacio
donde se cruzan leyenda, realidad, experiencia, ensoñación y denuncia,
recurriendo para su desarrollo a diversos medios como pintura, fotografía,
música, ediciones, vídeo, intervenciones urbanas, ropa pintada... Nacido
en la provincia de Badajoz, uno de los límites naturales del flamenco,
el interés de Alonso Gil por captar lo inasible de su ambiente no está
ligado a la búsqueda romántica de exotismo -convenientemente atrezzado-
que constituía el atractivo para los viajeros europeos. De hecho, en
muchas de sus obras intenta poner de manifiesto el contraste entre los
herederos de esos viajeros románticos -los turistas- y otros
modos de presencia foránea: inmigrantes, refugiados y exiliados. A la
vez, a menudo dirige su atención a lo "autóctono desplazado",
a los olvidados, que ya no son exóticos ni despiertan curiosidad y,
aunque auténticos, están en vías de extinción, pues no forman parte
del espectáculo de la industria cultural. Ruth Ewan (Aberdeen, Reino Unido, 1980) trabaja explorando ejemplos pasados y recientes de activismo cultural. Analiza cómo las ideas circulan por canales no oficiales como la tradición oral, las canciones o los mitos; estudia cómo un movimiento, acontecimiento o producto cultural del pasado puede producir reacciones en el presente; y de qué modo esas reacciones pueden ser controladas, transferidas o atemperadas para producir nuevos significados e interpretaciones. Del pasado efímero reúne cinco trabajos de Ewan que nunca se habían mostrado juntos (A Jukebox of People Trying to Change the World; Fang Sang; Did you kiss the foot that kicked you?; Unrecorded Future Tell Us What Broods There; y The Cutty Wren) e incluye un proyecto, Six Signs, realizado expresamente por la artista para el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. En estos trabajos se explora el lirismo como comentario social: la manera en que la gente ha utilizado los procesos creativos, como el proceso de componer una canción, para expresar su deseo de una sociedad más justa, intentando así reformar y reestructurar el mundo en el que vivimos.
En los vídeos, canciones y obras textuales de Annika Ström hay una transfiguración poética de lo ordinario. Sus vídeo-diarios nos muestran detalles de la vida cotidiana y experiencias aparentemente insignificantes y, por lo general, incluyen bandas sonoras pop de baja fidelidad compuestas por ella misma. En cierto sentido, las canciones de Ström, que suelen estar en primera persona y dirigirse a un "tú" no definido, se pueden considerar como canciones pop. Pero en otros aspectos, no tienen nada que ver con éstas: la artista sueca interpreta sus temas de un modo minimalista, siguiendo las convenciones formales del arte conceptual. Sus obras textuales están constituidas por frases que no suelen tener más que unas cuantas palabras y en las que casi nunca utiliza signos de puntuación ni letras mayúsculas. Estas frases, al igual que las canciones pop, son una combinación entre sinceridad y ambigüedad impersonal. Por ejemplo, cuando el texto dice "yo", ¿se refiere a Annika? Y si ese es el caso, cuando canta "tú", ¿está haciendo referencia a nosotros? La posibilidad de que exista esa cercanía o intimidad nos perturba, y hace que la obra vaya mucho más allá de esa frialdad que formalmente parece tener. Sesión
Jessica Diamond (Nueva York, 1957) utiliza el lenguaje como base de su trabajo que se caracteriza por su actitud crítica y satírica hacia la simbología de la cultura popular y en el que a menudo recurre a la pintura mural. Los dibujos y fragmentos de textos que traza sobre paredes y muros son mensajes enérgicos e incisivos con los que esta artista norteamericana, que siempre se ha mostrado muy crítica con el mercado del arte, se rebela contra la despersonalización del mundo en el que vivimos. Cuatro son los murales que se pueden ver en esta exposición: I Hate Business (1989), Is That All There Is? (1984 / 2010), Being Necessitates Faith In Paper (#2) (1989 / 2011) y Money Having Sex (1988). ¿Qué hay detrás del título Sin realidad no hay utopía, que da nombre a esta exposición colectiva? Detrás hay dos pensadores de distinto significado y calado: Jean Baudrillard y Andreas Huyssen. El primero ha definido la simulación como la generación "de algo real sin origen ni realidad" y, por tanto, ha diagnosticado la desaparición de lo real por lo virtual. Así, la interpretación y el sentido de esta muestra siguen la argumentación que Andreas Huyssen hizo en "Recuerdos de la utopía". Huyssen parte precisamente de Baudrillard al afirmar que al haberse perdido lo real y suplantado por su simulacro, la utopía no puede existir, ya que va íntimamente ligada a la superación o mejora de la realidad. Este es el sentido del título: sin realidad no puede haber utopía. Es decir, que en la era de los simulacros y de la virtualidad, la desaparición de lo real arrastra consigo a lo utópico.
Como figura destacada del pop-art alemán, vinculado al Realismo Capitalista, KP Brehmer (Berlín 1938 - Hamburgo 1997) ha trabajado durante décadas en la inversión de la economía capitalista de la producción de conocimiento mediante la descodificación de sus formas de nominación visual. Su trabajo permite al espectador reflexionar sobre las formas en que nuestra sociedad construye y visualiza los datos, y de cómo estos datos se utilizan como una herramienta de abstracción política. A test extending beyond the action es la primera retrospectiva de este artista alemán en España y su primera gran exposición desde la que tuvo lugar en el Museo Fridericianum de Kassel en 1998. La muestra nos acerca a algunos de sus trabajos más emblemáticos, como Trivialgrafik (1965/68), Ideale Landschaft (1968), Farbengeographien (1969-1973) o Seele und Gefühl eines Arbeiters (1978/80).
Inmaculada Salinas (Guadalcanal, Sevilla, 1967) presenta trabajos de los tres últimos años agrupados en cuatro series, cuyo denominador común es el carácter procesual y repetitivo de un conjunto de obras en papel a partir de un sujeto o tema determinado. La mujer como sujeto social es el eje que articula las series Prensadas (un estudio estadístico sobre la presencia/ausencia de la mujer en los medios de comunicación), Visión de las vencidas (en la que trabaja con citas de un libro del antropólogo Miguel León Portilla basado en escritos de indígenas mexicanos) y Espejo (40 cartulinas de papel blanco donde la artista escribe repetidamente la palabra mujer), mientras que en la serie Como fondo reflexiona sobre la autonomía de la pintura y su utilización como elemento ornamental representativo del poder.
Cercanías es un trabajo de crítica que, de varias maneras y a través de diferentes obras, nos permite reflexionar sobre una de las más violentas formas de dominación de Occidente: la representación. Como algunas de sus obras más recientes, en este proyecto expositivo Rogelio López Cuenca se centra en Andalucía, elaborando un mapa de ruta que pasa por la historia, la memoria, Al-Ándalus, el orientalismo, las migraciones, el turismo y las personalidades icónicas para evidenciar un tejido hecho de políticas de dominación. La videoinstalación "Nerja Once", la intervención "Holidays in the sun" o el proyecto todavía en proceso sobre la picassización de Málaga analizan el fuerte impacto que tiene el turismo en ciertos territorios y en las personas que habitan en ellos. Propuestas como "Canto VI" o "Bienvenidos" enfrentan turismo y migraciones, dos formas que tensan y cambian drásticamente el territorio. Finalmente, "El paraíso es de los extraños" aborda la construcción de la imagen del mundo árabe-islámico en Occidente donde, por un lado se glorifica el pasado árabe de ciertas ciudades como herencia histórica y por otro, se vive con temor el cambio estético y político que provoca la llegada de inmigrantes procedentes del norte de África. MÁS INFORMACIÓN >>
Marx Lounge de Alfredo Jaar es un espacio donde el público tiene acceso a un extenso archivo de material de lectura centrado en las ideas filosóficas, políticas, económicas y humanas de Marx y de otros teóricos, filósofos y escritores que han seguido, analizado y renovado sus teorías (desde Slavoj Žižek a Pierre Bourdieu, pasando por Stuart Hall, Jacques Rancière, Judith Butler, Ernesto Laclau, Chantal Mouffe, Frantz Fanon o Fredric Jameson). Se trata de una sala de lectura en la que el público puede sentarse a leer y reflexionar sobre la importancia y viabilidad del marxismo en el contexto contemporáneo y sobre las ideas políticas y filosóficas más importantes surgidas en los últimos tiempos. Ideas que pueden servirnos para comprender un poco mejor nuestro presente. MÁS INFORMACIÓN >>
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